FRANCISCO DE ANDRÉS en ABC DÃa 07/05/2015 – 09.58h
Diez dÃas después del publicitado rescate humanitario en Nepal de 26 bebés nacidos de padres israelÃes gais y madres de alquiler, las trabas burocráticas siguen impidiendo la salida de aquellas del paÃs para seguir cuidando de los niños. El caso ha abierto una fuerte polémica en los medios israelÃes, que se preguntan por la “humanidad†de rescatar a los padres israelÃes y a sus bebés, y dejar atrás a las madres sin preguntarse por su crÃtica situación personal -en medio del terremoto- ni por la circunstancia de que seguÃan amamantando a sus hijos. Los 26 niños “encargados†por padres homosexuales israelÃes nacieron en las seis semanas anteriores al seÃsmo.
La historia estalló el pasado dÃa 28, cuando se supo que un Boeing 747 israelà habÃa aterrizado en el aeropuerto Ben Gurion con 229 pasajeros, entre ellos 15 bebés israelÃes nacidos en Nepal poco antes del terremoto. Con ellos se completaba una operación de rescate de 26 bebés encargados a “vientres de alquiler†en Nepal por parejas de homosexuales israelÃes, ya que en Israel solo se permite legalmente esa práctica a las parejas heterosexuales. El impacto emocional de la operación de rescate se esfumó cuando se supo que a las madres se les habÃa impedido tomar el avión por no tener los papeles en regla para viajar a Israel.
Un encendido editorial del diario israelà “Haaretz†hizo sacar los colores al Gobierno. El rotativo criticó la rapidez que habÃan mostrado las autoridades en evacuar a sus nuevos ciudadanos prescindiendo de la suerte de sus madres. “¿Cómo es posible que ninguna de las historias de interés humano y de compasión mencionase a esas mujeres -de un origen socioeconómico tan difÃcil que les empujó a alquilar sus vientres- y que ahora están abandonadas en una zona de desastre como los hijos que tuvieron?â€, se pregunta en Haartez el analista Alon-Lee Green.
Para abundar en la polémica, ha trascendido que hay otras cien “madres de alquiler†en Nepal embarazadas por encargo de gais israelÃes. El fiscal del Estado ha prometido que todas ellas -de nacionalidad nepalà e india- podrán viajar a Israel para dar a luz allà a sus hijos. El ministro saliente del Interior también se ha visto en el brete de tener que asegurar que, para esas cien embarazadas, no habrá “problemas burocráticos†para viajar a Israel.
De fondo también se agita la polémica en torno a la ética del negocio de los “vientres de alquilerâ€. Algunos abogan por eliminar las actuales barreras legales en Israel: no tiene sentido, dicen los laicistas, que se permita esa técnica a las parejas heterosexuales y no a las homosexuales, que se ven por ello impelidas a acudir a paÃses pobres del extranjero para tener hijos. Otros denuncian el entero fenómeno de la maternidad por encargo, que califican de “tráfico con seres humanos†como cualquier otro. Hace años, los gais israelÃes acudÃan a la India en busca de “vientres de alquilerâ€; cuando Nueva Delhi prohibió ese comercio, se trasladaron al Nepal. En Canadá y Estados Unidos, tener un hijo de “madre de alquiler†puede costar más de 150.000 euros, frente a los 30.000 euros que cobran las agencias en Nepal.